Cantabria mejora la atención farmacéutica con el sistema de depósitos de farmacia en los centros de mayores y discapacidad

La residencia Félix de las Cuevas de Potes es el primer lugar donde ha entrado en funcionamiento este recurso que facilitará al usuario un pastillero con toda su medicación semanal
Mujer pasea con una profesional de una residencia de mayores (Foto: envato)
photo_camera Mujer pasea con una profesional de una residencia de mayores (Foto: envato)

Santander, 15 de febrero (Gobierno de Cantabria). La Consejería de Salud y el Colegio Oficial de Farmacéuticos han llegado a un acuerdo para desarrollar depósitos de farmacia con sistema personalizado de dosificación (SPD) con el fin de mejorar la revisión periódica de la medicación en los centros sociosanitarios y garantizar la equidad territorial de la prestación farmacéutica.  

Según ha informado el Gobierno regional en nota de prensa, el primero de ellos está situado en la residencia Félix de las Cuevas de Potes, un espacio sociosanitario de menos de 100 camas donde los mayores disfrutan ya de las ventajas del sistema. 

El depósito custodia cada dosificación personalizada para su posterior dispensación al usuario correspondiente. Se trata de un ‘pastillero semanal’ de cada paciente con la dosis correspondiente para cada toma de desayuno, comida, merienda y cena

Con este depósito, ubicado en Potes, se comienza la extensión de esta medida a otros centros de atención a la discapacidad y en oficinas de farmacia de Cantabria lo que permitirá mejorar el tratamiento farmacológico de las personas que presenten dificultades en el manejo y en su toma. Además, se mejoran objetivos como la revisión periódica de la medicación y la equidad territorial de la prestación farmacéutica. 

La dosificación se hace desde la oficina de farmacia, cuyos profesionales reciben la receta y preparan la medicación de manera semanal con el fin de que llegue en las mejores condiciones posibles al usuario. 

De esta manera, los farmacéuticos de los establecimientos ofrecen un estuche o pastillero en el que se organiza el tratamiento de las personas que tienen que tomar varios medicamentos al día. El sistema incluye referencias a la caducidad y trazabilidad de cada fármaco para mejorar la eficacia y seguridad de los tratamientos. 

Los profesionales de la Oficina de Farmacia son quienes se encargan también de garantizar que el depósito cuenta con las condiciones óptimas para la conservación de los fármacos. 

El Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones obliga a que las residencias de más de 100 camas cuenten con un servicio de farmacia hospitalaria, mientras que las de menos de un centenar pueden disponer de un depósito de medicamentos que podrá estar vinculado a una oficina de farmacia o a un servicio de farmacia hospitalaria. 

En Cantabria existen 82 centros sociales residenciales tanto para personas mayores como para personas con discapacidad, con más de 7.000 plazas. Estas cifras reflejan la importancia de prestar una especial atención a este colectivo. 

En el caso de que un centro de asistencia social de menos de cien camas quiera contar con un depósito de medicamentos, tiene que cumplir con una serie de instalaciones en un lugar que permita un correcto funcionamiento, y que sea seguro independiente y adecuado a sus fines de manera que se garantice la correcta conservación y custodia de los medicamentos. 

De igual modo, los depósitos de medicamentos deberán estar dotados del equipamiento técnico y tecnológico, así como del material y utillaje necesarios para realizar las funciones y actividades que le son propias. Comprenderá como mínimo mobiliario adecuado a su capacidad y actividad, además de un armario de seguridad o caja fuerte para la custodia de medicamentos estupefacientes. También de sistemas de control de las condiciones de temperatura y humedad, así como registro y control de la contabilidad de estupefacientes.